Ser árbitro no es sencillo e igual que los entrenadores y los jugadores necesitan prepararse para poder desenvolver su rol en cada partido de forma adecuada, a esto nos referimos con ser justo algo que no  siempre es fácil teniendo en cuenta que el baloncesto es un deporte que se desarrolla muy rápido y de contacto lo que provoca que no siempre sea fácil saber lo que es falta de lo que no porque el límite es una línea muy delgada.

Ser árbitro no solo es tener una buena preparación física y saberse el reglamento sino que también debe conocer determinados aspectos técnicos para establecer un criterio equitativo, por eso el Comite de Arbitros de Baloncesto de Murcia preparo una sesión técnica el pasado 21 de febrero en la que asistieron unos 20 árbitro de categoría nacional y autonómica. Esta charla corrió a cargo de Quini García, la cual se titulo Bloqueos directos e indirectos y ataque y defensa.

Este tema es muy complejo porque a veces tiene su dificultad ver sí el jugador que lleva a cabo el bloque está completamente en estático o cuando se produce el contacto se ha movido, está decisión se tiene que realizar en segundos y no siempre es sencillo acertar, por eso estás sesiones técnicas sirven para que los entrenadores expliquen como lo entrenan, que es lo que exigen a sus jugadores y qué es para ellos una falta en ataque o defensa cuando se produce un bloqueo ya sea directo o indirecto.

Esta charla sirve para acercar posturas porque no siempre el criterio arbitral está de acuerdo con la filosofía del entrenador, ya que hay aspectos del juego que le pueden resultar ajenos al árbitro si nunca ha jugado al baloncesto y viceversa que los principios del cilindro no siempre lo asimilen los entrenadores. Por eso el intercambio de ambos roles es positivo porque es una forma de acercar posturas y lograr que cada una de estas figuras entiendan mejor su trabajo.

En el futuro seguramente se harán más charlas de este tipo, dirigidas por entrenadores de categorías altas para lograr mejorar el arbitraje de la comunidad  y que lo árbitros estén más preparados en partidos difíciles en los que la presión y la velocidad no siempre te permite ver todos los aspectos del juego, pero sabiendo un poco de posicionamiento y de táctica se puede mejorar la lectura del juego.